Media Milwaukee

Student-Powered News | University of Wisconsin-Milwaukee

‘Me Siento Protegida en México’, Dice Migrante Venezolana

PIEDRAS NEGRAS, Mexico — Para Lizette, el sueño americano es algo en el cual ella está dispuesta para luchar.

Ella junto con sus tres hijos y su esposo embarcaron en un viaje que les tomaría años.

“Queremos entrar legalmente”, Lizette dijo.

Lizette decidió ir a la Ciudad de México para pedir asilo. El 13 de diciembre del 2023 es la fecha en la cual llegó a la capital mexicana. Quiere venir a los EE. UU. para sacar a su familia adelante.

Migrante venezolana en México pide asilo
Lizette, una migrante venezolana, se ha quedado en México para pedir asilo. Fotografía: Colton Pemble

La cita fue programada para el 5 de enero del 2024. Lamentablemente no llegó a tiempo y no la pudo recuperar. Ha estado esperando aproximadamente unos tres meses.

Para solicitar refugio en México, es requerido hacer varias cosas: presentar una carta donde se expresa la razón por la cual quiere quedarse en México. También tiene que ser extranjero.

El gobierno mexicano describe que las personas que tratan de solicitar refugio “tiene un plazo de 30 días hábiles para presentar su solicitud después de haber ingresado a México por lo que si se encuentra fuera de este plazo deberá explicar los motivos por lo que no presentó su solicitud en tiempo”.

Lizette, cuyos puestos incluían manicurista y comerciante en Venezuela, la ayudó a sobresalir en su país natal. Allí fue donde aprendió sobre las lenguas.

La vida forzó a Lizette y su familia a vivir en Ecuador, pero no sabían que sus vidas iban a cambiar para siempre.

Su familia vivió allá por cinco años y dos meses, pero había personas que la extorsionaba.

La hija menor de la venezolana nació en Ecuador, ahora haciéndolos una familia de seis.

Sus hijos ahora tienen 13, 11, 7 y 4 años.

Migrante venezolana en México
Lizette describe su viaje desde Venezuela. Fotografía: Colton Pemble

Incluso Lizette reveló que sus patrones de trabajo en Ecuador también emigraron hacia el país americano.

“Quiero darle más oportunidades y una vida mejor para mis hijos en los Estados Unidos,” Lizette expresó.

No planea entrar por el Río Bravo a pesar de estar tan cerca de él.

El viaje no fue fácil para Lizette y su familia. Ella se jaló su ligamento en su pierna y se le hinchó por cinco días. Debido a esto, su esposo la tuvo que cargar y cuidar. Esto sucedió en la selva en medio de Colombia y Panamá.

Ella no se olvida de dónde viene.

La mamá de cuatro tiene la teoría de porqué muchas personas ya no intentan emigrar: ha escuchado muchas personas decir que hay más obstáculos para llegar. Ella piensa que posiblemente también tiene que ver con la presencia policiaca.

Ella estuviera extremadamente feliz en llegar a los EE. UU. porque cumpliría con su sueño más anhelado.

Según Lizette, la gente pasa mucha hambre en Venezuela.

“Si desayunábamos, no cenábamos”, explicó Lizette. “Y si no desayunábamos, entonces cenábamos”.

Ella no quiere eso para sus hijos.

Piedras Negras, Coahuila ha sido su hogar por los últimos meses.

La ciudad fronteriza es considerada la más segura en el lado mexicano. La tasa de crimen es muy baja a comparación a otras ciudades como Nuevo Laredo y Ciudad Juárez.

El aumento de crimen en Piedras Negras durante los últimos tres años ha estado bajo con el índice de 30.00, según la página de Numbeo.

Ciudad Juárez se encuentra en 57.84 en la misma categoría, lo cual la diferencia es 27.84 indica.

Su familia y Lizette se han quedado en Casa de los Migrantes esperando su nueva oportunidad.

Quiere dejar la incertidumbre del “¿qué pasará?” y seguir adelante con su vida.

“Me siento protegida en México”, dijo la migrante.


This project was created through a journalism class at the University of Wisconsin-Milwaukee’s Journalism, Advertising and Media Studies Department. This work was made possible through the support of MPC Endowment Ltd., the philanthropic affiliate of the Milwaukee Press Club.